En una de las tantas batallas contra el español, un guerrero antes de salir a luchar, se despide de su familia y pide fuerza a los antepasados. Durante la batalla los Mapuche pierden y son amontonados para quemarlos. Este guerrero muy mal herido se hace el muerto y cuando empiezan a quemar los cuerpos de los Mapuche, él se escabulle hacia un monte.
Muy mal herido se dirige donde su familia, que quedaba a muchos días de camino. Débil y herido, en medio del monte se encuentra con el León. Se quedan mirando a los ojos. Antes que el León hiciera algo, el Kona (guerrero), le cuenta lo sucedido, que venía de una batalla contra el winka, donde los Mapuche habían perdido y él se dirigía a donde su familia. Le pide que lo deje pasar. Termina de contar esto el guerrero y mira al León, y éste está llorando. De esta forma llega el guerrero donde su familia y también cuenta lo sucedido.